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El Jack Russell terrier es una de las razas caninas más conocidas del mundo debido a sus características y personalidad. Su origen se encuentra en el Reino Unido, aunque su desarrollo se basó en el estándar marcado por un club de trabajo australiano.
Lo más llamativo de esta raza es su tamaño compacto, que posee al mismo tiempo grandes dosis de energía. Se caracteriza por su habitual pelaje blanco y por su permanente estado de alerta, además de una simpatía que le ha valido ser una de las mascotas predilectas de todo el planeta.
Tamaño del Jack Russell
El tamaño estándar del Jack Russell es de entre 25 y 38 cm a la cruz, y pesa entre 5 y 7 kilos aproximadamente. Es un perrito pequeño que sin embargo no se recomienda para vivir en pisos demasiado pequeños si no se cuenta con la disponibilidad para ejercitarlo durante mucho tiempo, puesto que toda su energía se traduciría en comportamientos no deseados dentro de casa.
Pelaje del Jack Russell
El pelaje del Jack Russell es su característica física más variable, y que es existen hasta tres variedades de pelo, que puede ser liso, duro y semiduro. En todos los casos es bastante resistente, y sirve como protección cuando nadan en el agua o excavan en la tierra. Dependiendo el tipo de pelo, el perro necesitará más o menos cuidados, pero por lo general se trata de un animal que se mantiene en un buen estado estético por sí solo.
Comportamiento del Jack Russell
El Jack Russell es un perro con una personalidad muy fuerte, que pondrá a prueba la paciencia y la determinación de su familia. Es incansable, y siempre querrá correr, saltar, o realizar cualquier otra actividad física. Se mantiene siempre alerta y deseoso de ejercitarse, y también necesitan una educación y entrenamiento constante para focalizar toda esa energía hacia comportamientos que no resulten desastrosos para las personas.
Cepillados
Por lo general, se recomienda realizar en cualquier perro un mínimo de un cepillado a la semana. Dependiendo del tipo de pelo del Jack Russell, estos cepillados podrían ser más espaciados en el tiempo, y realizarse únicamente en épocas de muda o cuando el pelaje se vea suelo o sucio.
Baños
Un baño cada seis u ocho semanas es suficiente para mantener al perro limpio. Es posible aumentar la frecuencia en caso de tratarse de un ejemplar que pase mucho tiempo en el exterior o que tienda a ensuciarse. En todo caso, siempre conviene realizar el baño con un champú especializado, porque uno de humanos podría hacer que sufriera reacciones alérgicas en la piel.
Alimentación
La alimentación dependerá especialmente de la cantidad de ejercicio que realice el animal. Como es lógico, cuanta más energía gaste, más necesidad tendrá de recuperarla, siempre dentro de unos márgenes para que no resulte excesivo y pueda presentar otros problemas. Lo más importante es apostar siempre por una alimentación de calidad que cumpla todas sus necesidades nutricionales.
Ejercicio
Sin duda alguna, el ejercicio es una de las cosas en las que más deberá incidir el propietario de un Jack Russell, además de su educación. Ya viva en el campo o en la ciudad, este animal necesita dar salida a toda su energía a través de salidas, deporte, carreras, persecuciones, y todo tipo de actividades. Estos animales son ideales para personas muy deportistas que quieran un compañero de aventuras diarias.
Educación
La educación es muy importante y básica para mantener una buena relación con el Jack Russell. Su temperamento es bastante fuerte, por eso requiere una persona con determinación y firmeza en su educación. Son amigables y sociables por naturaleza, pero también es conveniente que se socialice con otros perros desde cachorro, porque el ejemplar adulto puede presentar cierta agresividad y territorialidad.